The Chamanas en el Pasagüero

Debí escribir esto hace once días, no lo saben pero mi memoria es pésima. 

Costa Pantera abrió el escenario, no los conocía pero me gustó su onda, suave pero intenso, bailable y tranquilizador... dicen que yo veo belleza en todas las personas, y en la mayoría así es, así que por favor no se sorprendan si les digo que María José Báez tiene un encanto hipnotizador en su cuerpo, voz y teclado, mientras David Vargas lleva la batería con un baile serio e íntimo, liderados por Ramón Cerilla que aporta la simpatía y agresividad; cada uno tiene su estilo, parecen de aquellas cosas que no sabes cómo pero combinan. Me los volvería a encontrar con gusto.

Después empezó el ritual con la batería de Alejandro Bustillos rodeado del humo del copal, mascadas y rostros pintados repartió Amalia Mondragón, si hubiese hecho esto a tiempo recordaría el orden del track list, algunos aborazados lo tienen, creo que la primera fue Te juro que te amo.

Amalia / Bustillos / Manuel Calderón

Es una lástima que no haya vídeos aún (el tipo frente a mi sacó varios muy buenos), por que no tenía idea de que esta música se podía bailar, y de que manera! Amalia conquista el escenario, con su baile, con esa pasión para cantar que me fascina presenciar por que se transmite, toda la banda está dedicada a dar un show para complacer.

Héctor Carreón / Amalia

Tocaron todas las canciones del Once Once, más 4, mi favorita El triste, asolas con Fernando Fonseca, no la esperaba y es una de esas canciones que se cantan con el pecho en la garganta y el corazón en la mano. 

Fer / Amalia

Definitivamente es una banda de las que vale la pena ver en vivo, por lo menos así, íntimamente, antes de que llenen un Arena Mexico, porque tienen todo para llegar a grandes, incluyendo los publicistas pues han tenido muchas entrevistas en varios medios y varios estados.

Esa semana en el Distrito fue ajetreada para ellos y aún así dieron un show con energía y se dieron el tiempo para agradecer al público, tomarse fotos, firmas y platicar con el que se dejara. Sé que llegarán a muchos oídos melómanos.